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Me fascinó esta chaqueta cuando la vi, por la finura del acolchado que parece la topografía de un desierto, el color, los botones: es como una escultura. Me la pongo feliz, y al mismo tiempo pienso que podría estar expuesta en un museo. Tal vez por eso es atemporal, igual de ad hoc para alguien de 27 o de 70 años. Eso para mí es la mejor prueba de la calidad en una prenda. — @angelitamonge |
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Lo primero que veo en una prenda es la tela y sus detalles: color, corte, largo, terminaciones; cuántos años me va a acompañar. Sé lo que me queda bien y lo que me gusta. Elegí este vestido porque es simple pero con detalles que lo hacen especial. El algodón es suave y tiene peso, lo que le da movimiento. Es una prenda que no necesita adornos y se define por sí misma. — @bertolottorossana
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Me gusta mucho vestirme con conjuntos. Es muy versátil porque también uso cada prenda por separado. Además, la tela con las cicatrices es muy única. Me lo pongo con zapatillas o con un zapato más formal. Lo usé para la inauguración de una exposición mía de ChACO en el Museo de Arte Contemporáneo. — @josefinaconcha
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Esta pollera tiene un valor especial para mí. Es de un cruce colaborativo donde yo teñí las telas con la técnica itajime shibori. La textura y frescura del algodón hacen que usarla sea una experiencia súper placentera. La asocio con tardes veraniegas alegres, relajadas y compartidas con los que quiero. — @cvdiseno
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Elegí este vestido por lo fresco, versátil y, como todas las prendas SISA, cómodo. Me encanta la profundidad del color. El lino tiene la gracia de que se arruga y se ve natural. Lo uso en distintas estaciones ¡y para todo! Es muy fácil de vestir, es de esas prendas que se ponen sin pensar. Puedo llegar en bici al parque, sentarme en el piso sin preocuparme, y después ir al trabajo o salir en la noche, como si nada. — @tere.chubre
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Este enterito está en mi clóset desde hace cinco años. Lo compré porque me gusta su forma. Lo uso de día con botas largas y un abrigo grande. De noche también, o con zapatillas para el cambio de estación. Fue la pièce de resistance, como se dice en decoración, de toda una temporada. — @catafernandez.decoraciones
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Relaciono esta blusa con mis momentos de trabajo. Es una pieza básica imprescindible, con estructura, atemporal, que funciona siempre. También la uso con propuestas más casuales con jeans, o cuando quiero crear un look muy limpio, asertivo y minimalista. — @yusitic |
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Me compré esta blusa para mi celebración de 50 años. Invité a 80 de mis mejores amigas a una clase de cocina hecha por mí. La usé con un pañuelo de seda SISA. Es imposible deshacerme de esta blusa, está impecable. SISA me representa enormemente, tengo ropa que he ido comprando hace años. Todo lo uso mucho y por mucho tiempo. — @martitaserani
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Este vestido es de la primera colección de SISA. Lo he usado muchísimas veces en estos 10 años y siempre se siente muy especial. Como tiene aberturas para cinturón, cada vez que lo uso lo puedo personalizar con un pañuelo. Las formas y los tonos de los colores hacen de las prendas SISA objetos particulares, únicos. Las telas y la producción respetuosa les agregan valor. Me encanta sentirme parte de ese movimiento. — @monicaundurragastudio
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Elegí este pantalón por su forma cómoda, clásica, entretenida, y por el color. Lo combino con este top que es liviano y fresco. Los escogí en temporadas distintas sin saber que el color era el mismo. Fue mágico. Me encanta enfrentar mi día sintiéndome representada, fundida, integrada con la prenda que visto. Eso es SISA para mí. — @holmgrenbeatriz
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